sábado, 23 de enero de 2016

No soy poeta, soy de todo un poco



Un día traté de ser poeta. Porque ser poeta es como ir en un caballo y que el nombre de su jinete sea la muerte, como en El jinete pálido. Luego abandoné la idea para ser directamente un jinete, y que el infierno me siguiera.

Habría que distinguir a los poetas de los otros poetas que son el mismo repetido.

Escribe Vila-Matas que lo esencial es la muerte, la poesía y el relato. El resto es literatura, literatura que viaja en vagones de segunda clase. Que sólo la muerte está por encima de la poesía. Y que para estar muerto es preciso, por desgracia, morir.

Yo no soy poeta, soy como todo el mundo.


Uno, al final, descree de la vida, como de la poesía; de los medios y la literatura; así, en general, causando bajas, como en la guerra.

Podéis recitar toda la poesía que salga por vuestra garganta, pero ello no implica nada: ni ser ballenero, ni poeta.

Rendíos, os tengo rodeados.

Escribe Bolaño que cómo puedes decir que eres marxista. Cómo puedes decir que eres poeta, ¿piensas hacer la revolución con refranes?

Mi vecina checa se puso a recitar a Baudelaire; siempre lo hace, sólo con un pañuelo al cuello. Cuando termina, una veces se viste y otras no.

El polemista opina que los poetas son lobos con piel de cordero para los poetas.

2 comentarios:

Yolanda Colomé dijo...

Hay un halo de poesía en todo lo que escribes. Eres poeta a tu pesar!
Http://crazyxarela.blogspot.com.es

Yolanda Colomé dijo...

Hay un halo de poesía en todo lo que escribes. Eres poeta a tu pesar!
Http://crazyxarela.blogspot.com.es